En términos generales, el Syrah se caracteriza por ser un vino de acidez equilibrada y taninos suaves, lo que lo hace muy versátil para combinar con una amplia variedad de platos y bocadillos. Su aroma floral y afrutado se relaciona principalmente con frutas oscuras como la mora, la cereza o la ciruela, y además posee un ligero toque ahumado.
¿Con qué platos puedes acompañar el Syrah?
El maridaje del Syrah puede ser muy variado.
Aperitivo: el Syrah armoniza muy bien con quesos de sabores fuertes, como el queso Gouda, Emmental, Gorgonzola o quesos de cabra u oveja. Estos pueden ser a su vez acompañados de jamones y embutidos, hierbas variadas, pasta de aceitunas negras, alcaparras, hummus, pan ciabatta o una salsa de pimienta, ideales para servir en tabla.
Carnes rojas y de caza: las carnes rojas como aquellas de cordero, vacuno y cerdo, o de caza como el conejo o el jabalí, son el mejor maridaje para un vino Syrah. Estas pueden ser preparadas a las brasas y aromatizadas con distintas hierbas y especias, como albahaca y pimienta. Se pueden acompañar con pastas varias.
Pastas: otra buena opción para maridar este vino es acompañarlo con ricas pastas de cualquier tipo, que incluyan salsas sabrosas e intensas, como la salsa boloñesa o el pesto. En combinación con las carnes rojas y de caza van muy bien. Una lasagna clásica o un platillo de pasta con albóndigas son excelentes alternativas.
Vegetales: para los que no comen carne, una buena opción es maridar el Syrah con vegetales al horno como zapallos italianos, pimentones, tomates, berenjenas o setas, aunque también puedes cocinarlos a la plancha o a la parrilla. Los puedes servir especiados y con un toque ahumado, acompañados de un rico pesto.
Comida india: el curry indio, en todas sus versiones, es una excelente opción para comer junto a un vino Syrah, gracias a su intenso sabor especiado. Curry con quinoa y hortalizas verdes va muy bien; también puede acompañarse con tofu.
Y tú, ¿cuál de estas opciones escogerías para combinar con tu vino Syrah?